Leí: Nostalgia del Desierto

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Rebeca tiene su vida armada en Chile pero debe poner todo en pausa cuando recibe una llamada de su tía abuela, una mujer que vive en Inglaterra y que, a través de la llamada, le pide que se haga cargo de sus cenizas. En un viaje geográfico al viejo continente y personal a la historia de su familia, Rebeca va completando los agujeros en su memoria, entendiendo a quienes solían rodearla y armando el puzzle más interesante que ha tenido en frente.

Me prestaron este libro en el verano y lo leí en dos días. Sí, es corto, pero también es muy ameno para leer. Carol Brown, la autora, era una desconocida para mi pero disfruté mucho su novela: personajes definidos, un lenguaje no pretencioso, una historia nutrida de esos cuentos hiper lejanos y desérticos de la Pampa Iquiqueña, a la que tuve la suerte de viajar hace unos años.

Sin querer me fui metiendo mucho en la historia, temiendo lo peor e imaginando escenarios que daban con la respuesta al gran misterio del libro: ¿qué le pasó a la mamá de Rebeca? No les voy a contar eso pero sí les quiero decir que lloré al final. Me emocioné un montón y ni yo entiendo bien por qué. Son cosas que pasan cuando una historia simplemente se te mete en las venas y te agarra fuerte, aunque haya sido por dos días.

Hace mucho que no leía novela ambientada en Chile y me gustó regresar. Me cuesta un montón hacerme el tiempo de leer, en general, así que agradezco haber empezado este año con algo bueno, que leí con muchas ganas y que recomendaría también.

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