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Aunque este blog tiene más de 9 años ya, y ha servido como mi ventana al mundo, llevamos ya un año viviendo primordialmente a través de Internet. Todes. Y eso me hizo pensar sobre la imagen que proyectamos en línea. ¿Qué tan radical es? y por sobre todo, ¿qué tan alejada de la realidad puede ser?
No estoy hablando de inventarse una personalidad o de hacer catfish, eso es otro tema. Hablo de cómo nos ve la gente que interactúa con nosotros por redes sociales. A veces incluso es sin intención, esa imagen, sin cuidado pero está ahí.
Hace rato que pienso en el tema por una cosa personal, porque cada vez me convenzo más que quizás soy mejor amiga por Internet y no en persona. Eso de dar apoyo y estar ahí en forma 2D es mejor para mantener relaciones que en 3D. Hay un rollo gigante detrás de eso, con mucha experiencia de la que intento aprender y concientizar, sobre mí y sobre la gente etc. De ahí nace esto.
Entonces, ¿cómo es la Nat de twitter? ¿la de Instagram? ¿La de los podcasts? ¿La de verdad? Mirándome yo, claro, soy una mezcla de todas, pero no separo conscientemente mi personalidad para cada red social. Sin embargo me he dado cuenta que así como la gente con la que hablo por twitter es diferente a la de Instagram, también la idea que tienen de mi es diferente. Igual en Instagram me sigue más gente que me conoce en persona, quizás es por eso.
No es que me preocupe la imagen que tiene la gente de mí, creo que a estas alturas de la vida me importa más no traicionarme a mi misma o arrepentirme de algo que haga o diga, pero me causaba curiosidad lo de la imagen. Y sí estoy al tanto de algunos adjetivos que la gente asocia conmigo: ordenada, organizada, chistosa, estricta, creativa, apañadora.
Son palabras que me han mencionado y sobre todo que me lanzan cuando me quieren preguntar algo. «Nat, tu que eres super organizada, ¿me puedes ayudar con esto?» o «Ay, Nat, yo sabía que me ibas a comentar porque siempre apañas con esto.»
Lo segundo me encanta, mucho, porque de verdad hago un esfuerzo por apoyar los emprendimientos o las ideas de las mujeres que conozco, es algo consciente; pero lo primero siempre me da risa porque no soy organizada, soy desordenada, y esa imagen de tener todo bajo control es tan ajena que no sé de dónde viene. Porque me gustan los planners? No sé. Intento tener orden y en ciertas cosas sí soy organizada pero no al punto que aparento. Soy la reina de no terminar las cosas que comienzo.
Por eso les pregunto, a quienes aún leen este blog, ¿qué imagen creen estar proyectando? ¿Se dan espacio para sincerarse completamente por redes sociales? O ¿no les gusta ese tipo de exposición y por eso no participan de ellas? ¿Qué les parece el tema?
Natified 
A mí me gusta ser ultra chismosa con la vida de la gente pero no me gusta contar la mía. Creo que le tengo algo de miedo a las redes sociales porque suelen ser violentas o sí alguien dice alguna cosa se toma de otra manera, pero también es porque me gusta tener mi vida secreta y no expuesta. Te copio un tweet que alguien escribió y que expresa mejor mi sentir: «Es muy bonito compartir cosas por acá y al mismo tiempo tener la certeza de que ninguna persona tiene idea de lo que realmente sucede en nuestras vidas. Que la verdadera intimidad existe, si queremos, incluso en nuestros tiempos de sobredecirnos y sobremirarnos». Creo que esto refleja como me siento respecto a la vida virtual.
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El pensar en cómo nos ven en las redes sociales es un tema complicado y que puede llegar a “intoxicar”, de hecho yo me alejé varios meses de las redes y estoy volviendo de a poco. Está todo muy ligado a “tener que mostrarse feliz” en instagram, por ejemplo, y esa imagen siempre termina siendo forzada.
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Siii yo reconozco que si voy a alegar o llorar por algo no lo hago en instagram PERO si es un momento más íntimo, va ahí y no en Twitter, por ejemplo, donde me sigue más gente que no me conoce o nunca ha visto mi cara. Es raro el cambio, supongo que fue inconsciente tb.
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